Volver

Vuelvo a tu abrazo abrigado y profundo, donde el pensamiento se eclipsa y se detiene el ruido.

Vuelvo a tus manos tibias y fuertes, que pulsan palmo a palmo mi alma.

Vuelvo a erizarme como el primer instante, vuelvo a amarte y vuelvo a mirarte, como una flor que se abre para el sol, nutriéndose de él; amante eterna que por las noche se guarda para proteger su calor y su recuerdo.

Vuelvo a ti mi amor, porque es como volver a mi, como volver a mi centro, donde mis espadas no necesitan brillar ni cortar el viento; donde tú, mi segunda piel me abriga del mundo irreal y de sus sombras.

Vuelvo porque mis pesadas cadenas se vuelven breves hilos de humo si tu mano amable toma la mía, porque eres la bravura de mi voz anestesiada y porque subimos a lo alto sin ser dioses, sin ser místicos, ni especiales.

Amor mio, vuelvo a ti porque te amo, te amo y te amo.

Natalia de Asterión

Evocaciones en D menor

Escribir mientras uno oye a Mozart tiene resultados extravagantes, y aqui les muestro lo que pasa al hacerlo mientras oyo Requiem en D menor:

En mi nuca lanza relámpagos fríos hacia mis ojos, como si pudiera salivar y exhalar  calor mientras tanto, como queriendo evocar las mismas voces, me sorprenden mis oídos y mi cabeza tal como banco de sonidos, como un instrumento mas de sus guturales evocaciones, que por mis brazos surgen dedos que la desean tocar.

Soy un filamento frágil que al toque de su vibrato, tiembla mientras viaja el siguiente sonido de magnifica contextura, que mece mi glándula, me mieliniza hasta aquellos poros ocultos, y viaja lento por mi vientre la inocencia del descubrimiento, como diciéndome soledad, como diciéndome humanidad, como diciéndome carne... y mi nuca se escandaliza y suelta mi cabeza.

Soy un filamento frágil, como caudal de sangre que vibra tibia y lentamente, conmovida hasta la quietud. 

Y ahora expectante, llega sorprendentemente el violín de voces malditas que sollozan desde la tierra a un cielo oscuro, como si viera desde arriba y me tiraran las carnes de la espalda, como si fuera una voz mas, como si pudiera reducirme a su sonido, como un gran publico, que vive dentro mio. Soy un tambor que resume sus sonidos, me despliego encorbardo mi espalda, sintiendo su dolor.

Maldito publico que me eriza, que me lanza a la inpulcritud de mis pensamientos, que se lamentan lentamente y me tocan la nuca con la punta de sus voces. Esquizofrenica sensación, maravillosa espera, que su oboe suene hasta la luna, que la tesitura de sus bramidos me toque, que por si fuera poco, puedo sentirlo en mis viseras, mas no emularlo.

Soy un filamento delgado que se esconde y solo llora tras el sonido, mientras mis mejillas se ruborizan y levantan de sus pliegues, tocando mi piel sin siquiera estar aquí, soy un instrumento mas, emito emociones por sobre mi mirada taciturna, sobre la indolencia de mis letras. Rebotan en mi sus sonidos, en mi caja resonante, voltio a voltio sobre cada neurona.

Y ahora, un sonido familiar me estremece, como llaves propias por primera vez miradas, con formas diferentes y conocidas, me abro, me estalla la garganta que sin voz canta al unisono, y susurro, susurro, soy parte, con mi carne y la gruesura de mis palabras fáciles. Me enerva el suplico del que soy parte, me eleva y que vuelca a mi y a ese publico maldito y llorante. Me vuelco a mis espaldas encorvadas y empalidecidas de afección, como si orara a un dios inmenso e impávido, tan lejano como la estrella invisible del cielo nocturno. 

Soy una voz publica, y mis costillas se elevan de su posición repitiendo el andar de la sonoridad que me rodea, como si fuera parte, pero no, puncionando mis extremidades al dolor, al grito, a ser esa voz publica del mas allá.

Natalia de Asterión

Hoy: Sobre gente taimada

Esto es algo así como el texto sobre la labor social de la siutiquería que escribí hace algún tiempo, una queja social al orden y a las actitudes que me molestan en la esfera de lo humano, aunque en algunas personas parece ser sobrehumana su incapacidad social.

Y la gente taimada, personas que experimentan constantemente la pregunta ¿te pasa algo?, ya que siempre son los únicos en poner mala cara, son los que no dicen que les molesta algo, pero lo manifiestan con una sonrisa fingida y una abrazo frívolo, que solo evoca la pregunta de siempre ¿te pasa algo?, pero que responden siempre con hipocresía: No, nada, es tu idea.

Esa gente, nunca es mi amiga, pero logran llevarse bien con muchísima gente, como si nadie mas se diera cuenta. Son personas que debido a su incapacidad de decir lo que les pasa están rodeadas de misterios y enredos, pero de los que salen limpios siempre porque todo lo dicen por debajo, con sub-lecturas, por lo que no los puedes acusar de nada, pues nunca dicen, ni hacen nada y eso parece, con la cara de nada que ponen.

Pareciera que me molestara mucho o que me refiriera a alguien en especifico, pero hay tanta gente así, que hoy ocupan un capitulo completo de mi vida; gente tan cercana, como familiares, amigos de mis amigos, colegas, compañeros de curso y por supuesto, ex-amigos. Son personas que quise ayudar, que quise entender y quise escuchar alguna vez que les pasa, y me respondieron, subestimando mi inteligencia: No, nada, es tu idea. 

Supongo que mi fastidio es porque no puede hacer ningún feedback y solucionar nada, porque te han cerrado la puerta con algo peor que decirte, no quiero hablar, sino, con una mentira disfrazada en una sonrisa venenosa, siutica, hipócrita y taimada.

Ahora, lo común es que este tipo de personas sean mujeres, ¡¡¡¡y son muchas!!!!, por eso los hombres generalizan que, si a una mujer se le pregunta ¿te pasa algo? y te responde Nada, es porque algo le pasa... gracias a ellas les debemos el dicho.

Por eso invito a mis amigos, cada vez que observo esta situación, a no prestar ninguna atención, y en cambio, fingir venenosa, siutica, hipócrita y taimadamente que les creemos que no les pasa nada, pues SÉ que sufren cuando a nadie le llama la atención su actitud distante y taimada, pues hemos caído en su juego cuando nos enfrascamos en la inútil conversación de: Por favor, yo te conozco, se que te pasa algo, dímelo, confía en mi... bla bla bla!!!

Así que a Ud. le digo, erradicar a estas personas es imposible, quizás sean más que los honestos y directos, pero si podemos erradicar esa actitud; Ud. solo debe hacer como que no se dio cuenta y siga adelante ;)

Esta vez, Natalia Bevilacqua

La Maquina de Infernal de Pensamientos

Estoy en la casa de mi amor, las heridas se han curado prácticamente, pero la inseguridades me inundan en ocasiones, supongo que debemos aprender a amarnos otra vez, aprender a leer nuestras señales y a escucharnos, apagando nuestras expectativas y prejuicios... pero es difícil, no sólo de mi parte, también la de él.

Este es un camino vertiginosos aveces, me cuesta creer los grandes que cambios que han habido y aveces me encuentro observando de manera critica lo que veo de él, para vislumbrar alguna cuota de pasado, para cerciorarme de que no sea una careta o que simplemente no sea un cambio aparente. A veces sencillamente me encuentro incrédula, pienso que en cualquier momento la burbuja hace "Paff" y volveremos al sistema de antes.

Y es entonces que me digo ¿cuando apagaré la maquina infernal de pensamientos?, cuando me dedicaré a vivir éste amor hermoso que tenemos.

Ah! Amor, me cuestionas, me subes y me bajas a tu antojo, con sólo un gesto me tienes llena de mariposas, y con sólo un aspaviento de hostilidad me tienes angustiada buscando un abrazo que me confirme que no volverás a ser el mismo, con sólo una llamada extraña o un saludo distinto, me vuelves loca creyendo que se rompió la burbuja feliz.

Y ahora?... pues bien, ahora me has saludado y me parece que te ocurre algo y me dices que piense que podría ser lo que te pasa; que me saludas extraño y frío... ¿Porque me haces esto?, esos cuestionamientos paternalistas, como si tuvieras una lección que darme, ¿porque lo haces?, sólo me dan ganas de volver a mi casa cuando lo haces, sólo quiero borrarme... es una sensación muy intensa de tristeza: presiento a cada momento que volverás a ser el mismo.

¿Como hago para parar esta Maquina estúpida?, es que verdaderamente ahora no estoy bien, podrías simplemente alzar tu mano y rozarme, como diciendo "te amo y pienso en ti", sin que dejes de atender a tu amigo y bastaría para que yo dejé de sufrir ahora, bastaría para que piense que sólo me estabas molestando cuando dijiste eso y que en realidad todo esta bien, un simple roce, o que simplemente te des vuelta y me sonrías con amor.

Debo hacer miles de cosas y tu saludo extraño me cagó la mente, me cagó las capacidades de realizar cualquier cosa, y tan sólo quiero escapar.

Oh! maquina infernal de pensamiento apagate ahora!!!!

NB

No te voy a hacer mal

Cuanta frescura!
Es como si por fin pudiera descansar, como que por fin puedo mirar de frente, sin esa postura dolorosa.

Es cierto que no será facil, pero es más cierto aún, que lo amo con mi alma y mi vida, que podrán llegar mil tempestades y yo me quedaré aqui cuidandolo, porque eso quiero, por fin. Es que mi alma algo amorotonada ha salido de la oscuridad en que se encontraba y hoy, aunque aún me siento fragil, quiero sanarlo, al igual que cuando me lo prometi hace tres años: sanare su alma alicaida, sanaré su alma inquebrantable y vidriosa con mi amor y mis cuidados.

Arturo, yo te sanaré, dejame entrar, ya no te voy a hacer mal (me recuerda una cancion, que tantas veces tu me has dedicado). Y si antes no dudé en poner fin a nuestra relación, puedo decir a mi favor que me nublaba el desamor y la falta de cariño... pero hoy todo es diferente, hoy me siento parte de una relación hermosisima, junto a un hombre comprensivo y grande, un hombre con convivvion y perserevante, amoroso y lleno de ingenuidad, que me ama por sobre todo y es mi compañero, y es mi amigo, y es mi amante... es él.

Lo amo, lo amo, lo amo! y no quisiera verlo triste otra vez, no quisiera que los hechos de la vida se tornen nuevamente lugubrosos, no permitiré que las antiguas penas vuelvan, y no se trata de una promesa de lucha, es una promesa de vida, de vivirlo a él, de vivir sus caricias, su cariño y su entrega infinita. Y que él me viva a mi, pues mucho tiempo nos nublamos de verborrea barata, mucho tiempo nos atascamos con nada... pero hoy volamos amor, volamos lejos... pero porfavor cariño no pienses que te haré mal. Tomame fuerte de mis manos, apoyate en mis hombros, porque viajaremos juntos.

Cuante frescura!
Amor, no permitas que las inseguridades te lleven, yo siempre esperé que fueras como eres hoy, no puede ser así de paradójica la vida, no puede ser así de maldita, que ahora que las aguas son calidas, tu te hayas vuelto niebla fria y volatil, no puede ser... no te permitas pensar mal, que no te voy a hacer mal.





Te amo!!!

Vértigo, que el mundo pare!!

Vértigo, que el mundo pare!!!


Estoy sentada en la biblioteca de universidad y observo a toda esta gente, todo parte de un gran engranaje maravilloso y yo, casi que me encuentro fuera de lugar, como buscando alguna cosa a la que pertenecer, en donde sentirme cómoda.


Siento vértigo frente a todos los asuntos que me acontecen y es como que tengo ganas de borrarme, no se, de embriagarme, de drogarme, y despertar con mi vida solucionada. Verdaderamente estoy fuera de lugar, desadaptada y poco convencional, odio la miseria con la que transcurren los segundos, con esa mezquindad que me dan ganas de gritar, a ver si alguna cosa pasa... como si mi vida no estuviera suficientemente removida.


Y tú, Arturo, ni mas ni menos, el mismo de mi vida, la carne que en mis carnes habita, el aire que yo misma respiro, mi alma, mi pena y mi sonrisa. Ese Arturo que no me quita la vista de encima, me pide que despabile y yo sólo quiero borrarme mas. 


Como quisiera evadir la responsabilidad de mi edad, de mis compromisos y de mi vida, quisiera volver atrás y reiniciar... volver muuuuuuuy atrás, añoro cosas tan pasadas que no tienen sentido, quisiera volver a creer, volver todas las paginas atrás y rehacer el camino mal logrado. Pero no, aquí estoy, topando con mi vida de frente y tratando de cerrar los ojos a ver si desaparece.


Necesito de esos malos amigos, necesito irme de juerga, desaparecer nada más, que nadie me extrañe... necesito no pertenecer en serio, no pertenecer verdaderamente, pues hoy, soy solo un  puesto vacío en cada cosa que ejecuto, estoy respirando el aire y diciendo las palabras que me corresponden, como en un parlamento mortal. Pero no estoy verdaderamente, estoy en mi mente, añorando profundamente volver el tiempo atrás.


Estoy ahí, sin sentirme parte, lo soy: soy hermana, hija, compañera, polola, colega, amiga, familiar, conocida... pertenezco sin quererlo. 


Ah! quitenme el nombre y devuélvanme al vientre, que para estupideces no estoy aquí. Vuelvanme niña, que no quiero crecer, vuelvanme niña que quiero volver a creer.


Y tú, Arturo, ni mas ni menos, el mismo de mi vida, la carne que en mis carnes habita, el aire que yo misma respiro, mi alma, mi pena y mi sonrisa. Ese Arturo que no me quita la vista de encima, me pide que despabile y yo sólo quiero borrarme mas. 


Antes sentía que tenía algo que demostrar, pero hoy el sol no brilla y yo no tengo nada que reverberar... como si quisiera ser mejor. Ya no me interesa siendo honesta; pero aun así, estoy aquí escribiendo, debe ser porque odio las últimas lineas de mi vida; son un detestable e incapaz intento de mi, un intento que no ama, no odia, no se afana, ni se desliga... soy un ente andante que busca una corriente que la aviente... espero que una me lleve lejos, tan lejos que los recuerdos se queden en casa, tan lejos que baste con parar el mundo para volar.


oh!, Que el mundo pare!
NB

Mente muerta

Maldita procrastinación, me estoy enterrando y nisiquiera puedo pensar con claridad, en estos momentos estoy en la universidad descargando los programas de mis clases y tengo la certeza de que ya me heche un ramo... Y como que me cuesta sobreponerme a mis ataduras.

Me duele la cabeza desde que me levante hoy, tengo el animo de mierda y auqnue no debería sentirme así, estoy tremendamente bajoneada, hace mucho tiempo que no estaba así, hace más de tres años que no me encontraba en un estado desastrozo como el que hoy me gobierna, no puedo orenar mis ideas... es desesperante, si alguien pudiera estar dentro mio lo sabría, quisiera ir mas rapido, pero siento como si mi cerebro estubiera en arenas movedizas, no puedo salir de este letargo astiante, a veces me hablan y no puedo responder, a veces quiro planificar algo tan simple como al micro que debo tomar y no puedo resolverlo, es como si constantemente estuviera rescatando viejos recuerdos... pero son cosas que hace un par de semanas no me costaban ni un poco.

Ayer tuve una prueba y estudie en el día, pero en el estado que me encuentro, era como haber "des-estudiado", me quede pensando sentada si debía ir o no a dar la prueba y derrepente me llama una compañera y me pregunta si voy a dar la prueba y yo le dije "No se, estoy pensandolo", ella se rio y me dijo "Ven a darla" y yo le dije "Bueno"... fue una conversación absolutametente estupida, pero gracias a ella tomé las llaves y me fui a la universidad.

Pero ahi no termina la historia, al llegar a la "U" me senti nuevamente desorientada y pense en tomarme un té y mientras lo hacia trababa de recordar lo que habia repasado en la micro y era como si no hubiera estudiado nada y pense en no dar la prueba, en eso veo a mis compañeros irse a dar la prueba y yo me paro y me voy, desidida a no dar la prueba, llegue a la salida de la universidad y me arrpentí y me fui a la sala a dar la prueba, pensé "Tengo que recordar algo en la prueba, esta no me la ganará".

Llegué a la entrada de la sala y me senté afuera, pensé, mejor espero a mis compañeros y no doy la prueba, pero no transcurrió ni dos segundos y entre a dar la prueba... uf!!!

No soporto mis lentos procesos del pensamiento, no se que me esta ocurriendo, pero me asusta... nunca he sido una mujer muy despierta, pero ahora me desconozco, además estoy tremendamente maleable, como vulnerable, supongo que mi mente esta traicionandome, por lo que es mejor confiar en los otros, entonces si me dicen "arriba" no lo cuestiono, si me dicen "Negro" o "blanco" tampoco... sencillamente no hay nadie bajo mi craneo.

Podría quedarme con facilidad mirando una pared... esto es apestante! y me cuesta, me cuesta y me cuesta hablar de cosas con contenido o captar las bromas. ¿Que será?, ¿Porque estoy así?

Lo cierto es que no me soporto y estan peligrando mis notas de la universidad, sin contar con un ramo abandonado, que quizás debo dar por perdido... me sorprende que esto me pase a mi, mi gran valor era pensar de forma punzante y veloz, mejor dicho, ese es mi unico valor, ahora no se con que compensar, no tengo otra cosa que ofrecer si me falla mi maravillosa maquina de pensamientos.

Quizas me tomé muy en serio esto de escuchar al corazón y no la razón jajajaajaja eso es mentira. Ciertamente algo me está pasando, sin contar con la ansiedad feroz que tengo... agggggrrrr, si alguien pudiera estar en mis zapatos lloraría, y yo no tengo mente ni para eso... llorar.

NB

Incidental

... entre los sonidos de tu recuerdo y los sonidos de mis pensamientos que pretendo apagar... 

Que sería

Esto me ocurría hace algunos meses atrás... supongo que se han invertido un poco los papeles...









NB.

Terror de errores

Sin tentar a apresurar mis pensamientos, ni aletargarlos por un fin que bien pudiera estar perdiendo con aspavientos inertes, quisiera medir un momento mi pulso, e inevitablemente me doy cuenta que el tiempo va muy rápido quizás o soy yo, no lo se.

Pero sin dudas estoy aterrada, no sólo por los momentos que estamos cursando hoy, estoy aterrada de que estas dudas terribles, esta sensación de ahogo y todas estas inseguridades surjan nuevamente... me refiero a que, si decido por un "nosotros" y vuelvo decidida, con toda seguridad seré feliz y lo haré feliz a él, pero ¿si esto lo vuelvo a sentir?, ¿si esto vuelve a ocurrir?

Ese es mi terror... terror de que no me puedo permitir volver a "esto". Y es entonces que siento que el tiempo no perdona, pues quisiera decir que en estos tres días he resuelto todo, pero no es así, quiera que fuera un hecho que en dos semanas estaré lista, pero no lo puedo afirmar. Pues para mi estar lista, es poder decir con total convicción: Te acepto para siempre.

Ahhhh!!! que fuertes palabras, creo a ratos que estoy dispuesta a prometer un mañana juntos, pero no se de eternidades u otras certezas. A veces se me hace grande un "para siempre", se me hace grande, pero no de peso, se me hace grande porque no se si doy el ancho.

Como acelero este proceso, para poder decir finalmente si estoy lista o no, y de ser así no arrepentirme jamás de aquella decisión, sea afirmativa o negativa, estar completamente segura de mi y de él. ¿Como me prometo que estas fantasmas no volverán?, ¿como le digo a él que confíe en mi? si ni yo pondría las manos al fuego por mi....

Lo concreto es que tengo dos semanas para tomar una determinación, y no es justo tomar más tiempo que ese, ni se si me serviría tener más tiempo... simplemente tengo dos semanas para aclararme, asegurarme, tomar nuevos aires y estar completamente segura de que esto no volverá a ocurrir... uf! 

Debo dejar de pensar y comenzar a sentir, es algo fuera de mi esencia, pero debo hacerlo, esa es la formula ya que no me ha funcionado la razón... y es la formula que me he pedido él.

Lo intentaré con el alma, después veré que hago con el resto...

NB.

Daños y reparos

Me dice la vida, las personas, mi razón y él, que me equivoco, ¿será posible reparar el daño hecho si es verdad que estoy errada?....







Espero que pasen los días, las horas y los minutos, y que si he elegido un camino errante, las fluctuaciones de mi animo y de mi cuerpo me dejen saberlo a tiempo. Se que te amo y lo sé con el dolor de dañarnos, pero no me puedo permitir estar al lado tuyo cuestionándote, prefiero pensar y sentir con cierta distancia, y volver con los brazos abiertos y convencida desde el alma, con palabras propias, sobre el hecho de que amarte es lo mejor que me ha ocurrido en la vida y disipar todas las dudas... y por sobre todo, que el tiempo que nos hemos dado sea suficiente para merecerte, para sentirme digna de ti... pues ahora veo, que parte de toda mi inseguridad, es que también dudo de que yo me merezca al hombre que estoy forjando con mis exigencias y que por cierto, ha respondido con superioridad.


Pienso a ratos, ¿quien soy yo para pedirle tantos cambios?, ¿con que moral le digo que no confío en él?, si con cada acto de este ultimo tiempo, estoy terminando por cimentar una grieta enorme entre nosotros, ¿con que cara me atrevo a hacerlo pasar por esta pena?... no paro de pensar en lo estúpida que estoy siendo, pero dentro de mi se que lo necesito, que egoístamente no me queda otro camino que lamentarme cada día, para simplemente saborear la libertad y saborear esa dolorosa, pero exquisita sensación de extrañarte.


Necesito extrañarte, necesitaba sentir el dolor de la perdida, desentumecerme un poco, para no olvidar jamás; que aunque hayan días que te odie, esos solo serán días, porque lo que hoy siento es una eternidad de días sobre mi pecho, une eternidad de lamentos y una eternidad de arrepentimientos... y sin embargo, necesito morir un poco, para vivir fervorosamente. 


A cambio, también he hecho un compromiso conmigo misma: debo convertirme en la mujer digna de su amor, de su respeto y su coraje. Digna en términos de valorarme como soy y mejorar lo que hay por pulir, digna también en volver decidida, sea como sea, decidida, y nunca más titubear como lo hago hoy. Para que un día él pueda decir, como nunca lo ha hecho, "confío en ti". Pues si antes no confiaba en mi, hoy con justa razón, menos lo hará.


Amor, hoy me has sacudido con tu fuerza, me has sacudido con tus exigencias, me has sacudido con tu dureza para hablarme... pero me diste algo, una aliciente para luchar en el camino de un nosotros, curaré mis heridas, mi autoestima, mi confianza y mi carácter; fortaleceré mi voz y mi convicción; y por sobre todo, no desaprovecharé este tiempo, haré que no te arrepientas de habérmelo otorgado. 


Y sólo te pido una vez más, espérame y no me odies. 


Dolorosamente, te amo.




NB.

Adios amor

Comienzan los días mas dificiles, los más dificiles en terminos de perdida, emocionalmente desgastadores y mas incomprensibles para mi corazón. Es que es terriblemente dificil abandonar lo que uno ama con su alma y cuerpo, simplemente por que la razón nos impide amar con libertad, simplemente porque la convicción de estar errada es superior...

Es una desición tan dolorosamente drastica que quisiera volver los día atrás y suprimir cada momento en que pense con sobriedad sobre esta relación. Suprimir de mi memoria cada pista de que esto no iba a ningún lado, eliminar todas las veces en que tuve la sensación de que estaba eligiendo mal; sólo para poder amar en paz... amar en paz, de verdad.

Como es dificil caminar o prestar atencón a una simple conversación cuando siento el dolor terrible de los pensamientos que evoco, como es dificil levantar la cabeza, cuando quisiera meterla entre mis piernas y desaparecer, como es de dificil, que mi mejor amigo no me puede ayudar, pues no deje sólo a mi amor, deje a mi gran amigo, a mi gran acompañante... como me pesa saber que no puedo estrechar un abrazo con él para que me consuele en este momento, para que me contenga y me diga que estará ahi.

Se que es una sabia desición y quizás lo unico que me ayuda a no envenenarme de pena es pensar, que un día, en algún tiempo despues, nos reencontremos, crecidos y madurados, sólo para contemplarlo y decirle, "yo si te amé de verdad".

Como duele el alma, la garganta, la respiración, las piernas... y sobre todo el alma. Y como si me sobrase dolor, repaso a cada momento su mirada, su voz, su aroma en mi cama, sus manos y su piel... repaso nuestros besos, como si me valieran de algo en estos momentos.

Quisiera desocupar mi cuerpo de mi sangre, solo para no sentir más, como si con eso parara el dolor que tengo, como si con eso mi corazón dejaría de molestarme a cada hora... ¿donde esta el fuego de mi alma?, ¿donde esta mi fortaleza?, ¿donde esta mi libertad de pensar?, ¿donde esta mi vida?...

... que días terriblemente dificiles vienen, ¿como me ayudo?, ¿como escapo?... ¿a quien recurro si deseo gritar, llorar y patalear?- Simplemente, estoy sola. Y él, ¿como estará?, quizás es este el pensamiento que mas me pena a cada hora, pensar en el dolor que he provocado, pensar en lo desamparado que puede estar esta noche y querer profundamente que alguien lo rescate de su tristeza, querer profundamente reencarnarme a su lado, para calmar su pena, para abrazarlo y mitigar su dolor...

Hoy no lloro por mi, lloro por dos, por apuñalar mi corazón y mi sentir, y por dañar a mi amor por esta causa. Lloro con la fuerza de dos, porque mi razón nos castiga, porque mi razón ganó esta partida... lloro porque es irreperable lo que he hecho y porque no me debo atrever a reperarlo tampoco... simplemente lloro en el desconsuelo de un cristal roto, que yo misma quebré...

Si Dios existes, ayudame a sobrevivir, que no puedo yo misma; si existes elimina mi culpa... y sobre todo, si existes; cuidalo a él y no dejes que se derrumbe, cuidalo y acompañalo mejor que como lo haría yo... cuidalo y arropalo esta noche, reconfortalo en tus manos... si existes, no permitas que sufra más, haz que me olvide y que me guarde como un recuerdo feliz, si existes, haz que no me odie...

NB

A Arturo

Cuando te vi no lo podía saber, cuando nos besamos ni lo pensé, cuando abordamos los recuerdos del otro me sentí cercana, pero no me animé, cuando nos prometimos amor eterno no lo pesé; cuando hicimos cada cosa a través del tiempo, tomados de las manos y de todo lo demás, nunca me posé en tu hombro, te mire atentamente y te sentí.

Los años han pasado y la pasión de las promesas se ha ido, en cambio me queda la consistencia de no necesitar una confirmación de que cuento contigo para saber que estas junto a mi, me queda la tranquilidad de tus besos por las mañanas, el sentimiento constante, la convicción del futuro, la intimidad de las miradas, una segunda piel para tocar, abrigarme y abrigar, la comunicación constante incluso en la lejanía. Me queda el amor y la humanidad de lo que somos.


Y ahora me poso en tu hombro, te miro desde el confort del abrigo de tus manos y puedo sentir, como me lleno de sentimientos hasta la garganta y puedo decirte "te amo", con tanta seguridad, con tanta ansiedad como el primer día, pero con la convicción de la mutualidad.


Te amo a cada hora, sin pensar en ti incluso, te amo en cada pulso, aunque me penen los pensamientos del día, te amo en el vacío del ocio y en las palabras que incluso no te digo. Sencillamente te amo, porque vives en mi, te amo por que existo y respiro... te amo.




A mi amor Arturo...


NB

Te amo

El reloj marcaba las diez de la mañana, Brandeis llegaba recién de su trabajo con sus ojos somnolientos de una larga noche. A la misma hora Ana se alistaba para llamar a Brandeis por teléfono, aún sentía las astillas clavadas en su mirada, con la ensangrentada presencia del dolor y de la rabia en su garganta, sin atreverse a maldecir a su amado.

Ana sostiene el teléfono pensando en pedir auxilio y Brandeis intentando mantenerse entre estados, oía a su Ana con displicencia, a pesar de amarla con el calor de sus venas y con la misma confianza de que amanecerá cada día, pero no podía alentarse a demostrarlo.

Ana se embravecía con cada minuto de silencio, oyendo la respiración del otro lado, como si se tratara de un muerto, a veces incluso su saliva parecía más acuosa, como si el desamor la hiciera enfermar, empalidecer y desmallar, gritaba auxilio con cada bramido de su aliento y Brandeis sólo respiraba al teléfono.

Brandeis sabía que Ana estaba triste, pero no podía olvidar aquellos días, horas y meses de desamor, no quería verla sufrir, pero no podía desprenderse de la jodida costumbre de tratar con desdén. Brandeis se miraba al espejo y se sentía maldito, pero no podía hacer sentir mejor a quien tanto ama.

Ana, suspira antes de pensar en abandonarlo y como por nigromancia Brandeis entiende... entonces le dice - "Yo también te amo" - y como un milagro se desescarchó su alma, como por milagro el vaho de su aliento humedeció el teléfono, como por milagro sus labios se humedecieron de ganas de besar.

Ana enjugó sus lagrimas, incluso aquellas secas que había marcado sendero en sus mejillas la noche anterior. Al hacerlo sus manos dejaron de temblar de abandono, su voz se volvió una cascada, con sonido de risa y sabor a azúcar en el café.

Te amo, te amo y te amo - no dejaron de decirlo en la siguiente hora al teléfono, Brandeis lloró al sentir la ligereza de su cuerpo cuando oyó a su alma y Ana sonrió al escuchar la cálida voz de Brandeis, como si volviera de un largo viaje.

Sus voces se besaron, sus almas hicieron el amor justo en donde sus lenguas formaban sus palabras, sus sentidos se calmaron al oír la tranquilidad del otro... pero por fin se amaron cuando colgaron el teléfono y se juntaron, sólo para rozar sus meñiques y decir te amo, mientras sus ojos se llenaban del otro.

"Brandeis y Ana por siempre"- tallaron en un árbol, justo abajo de "Arturo y Natalia"... era el árbol de los amores eternos.

Natalia de Asterión 

No duele, no me altera, ni me urge

Los paradigmas cambian, es que ya no soy la de antes... sólo hace un año o menos, todo es diferente, las cosas tienen otro sabor y no quiero recobrar ese sabor a nuevo, quiero un sabor que me acompañe.


No duele, no me altera, ni me urge; sólo no soy la de antes.
No quiero cambiar el mundo, sólo quiero que se moldee a mi, sólo un poco. Pero si no es posible, no duele, no me altera, ni me urge... las son y no son, al mismo tiempo o no, pero quisiera saber: ¿me acompañarías en mi nueva yo?


Si no, no me duele, no me altera, ni me urge... quizás te extrañe demasiado.















¿Me acompañarías?