“De noche, con el pecho apretado olvidando el porque de tanto pánico, fijando mi atención solo en mi cuerpo, la manera en que se mueve cuando estoy tan inestable, viendo como tiemblo, sintiendo mi respirar agitado, sintiendo el calor de mis lagrimas por mis mejillas y mi cuello. Y que después de tanto movimiento y fugaces olvidos, ya no recuerdo por que; vuelvo a mi, yo como calma y sosiego llego a mi cuerpo, me “despabilo”, y me siento, ya no me observo, soy por fin parte de mi misma. Me aquieto hasta que ya mi respiración es ligera, al compás del viento, silenciosa y por mis músculos solo circula sangre, siento como mi corazón la bombea, como llega a la punta de mis dedos, como mis pies se hielan, vuelvo a las sabanas y duermo al fin. Pero ya no recuerdo porque”.

Los últimos días me he puesto a pensar en la felicidad, en cosas que completen un rato la angustiosa búsqueda, entonces recuerdo una frase que alguna vez leí y decía, “una comida hace feliz a mas gente que el descubrimiento de una estrella” o algo así, entonces comienzo a creer que la utópica idea de ser felices podría ser posible, siendo que esta nos llega de simples gestos, de actos; y si no es así al menos algo de inocencia va quedando en mi.

He pensado en algo así como formulas para superar la eterna frustración, he pensado en modos de evasión, pero lo que realmente me evoca este pensamiento, es que paso tanto tiempo pensando en cosas, pero nunca había pensado en el porqué de tanto cuestionamiento, ¿Qué busco?

Ahora no se nada, estoy tratando de rescatar alguna fe dentro de mí, tratando de aferrarme a algo que no sean números, pero tiendo a creer que me estaría engañando al hacer eso y estando conciente de tal engaño, esto dejaría de serlo, entonces simplemente volvería a lo mismo, a no creer. En este instante se que busco alguna empatía con ese ser infantil, ese ser libre que no se cuestiona nada, aquel que vive por vivir y que le da espacio a la fantasía, deseo ser así de incorruptible y así de segura.

Puedo tender a pensar al revés y en vez de seguir buscando una respuesta como los románticos griegos, cuestionar el porque de tal búsqueda como lo haría Kant, o quizás volver de nuevo al comienzo y recrear mi realidad y configurarla como complejas ideas y todo este pensar como un falso reflejo de mis sentidos, fruto de mis cadenas como Platón, de verdad no se de que manera revestir mi pregunta, de que manera protegerme del vértigo de no saber hacia donde voy.

Pero al final y en la práctica no hay más que meros pensamientos, una locura de momento sin mayor trascendencia, la cumbre del intento por perseguir la perfección, un minúsculo esfuerzo cuando detrás esta toda la humanidad, “toda”, tratando de llegar a lo mismo que uno.

Ahora un respiro no es lo que quiero, ahora quiero ser aquel ser perfecto del que hable, que con la desnudes de su inocencia, casi evidente, descubre las cosas y sólo cree, por que no sabe de infelicidad ni de cuestionamientos, ese es mi cuento de hadas, el ser poético de mis aspiraciones.

En un principio quería la verdad, pero hoy quiero ingenuidad.

DADA...el vomito

En un recorrido por todo lo que el hombre ha creado, me he dado cuenta de lo alejados de la humanidad que estamos, todos, vivimos en un letargo absoluto, creyendo ser libres, pero en realidad todo nuestro accionar esta definido por reglas preestablecidas, que aceptamos por el solo hecho de estar ahí desde que nacemos, pero son simplemente el fruto de la libertad de algunos que se excede al punto de privarnos a los otros, nosotros mismos, la libertad y poder de algunos que fueron capaces de convencer a esa gran parte de la humanidad que se somete, que busca ideales para fortalecerse, por que no encontraron una idea original pera ser felices, o por que no aceptan que la felicidad es solo esta, y no la que poetizan en sus pensares. Entonces copian una realidad que es fruto de la libertad de ese otro con más poder (inteligencia podría ser), y las hacen suyas, y con ellas caracterizan su ser y sus proyecciones… entonces llegamos a este mundo, con tantos dogmas y tradiciones que ya han perdido su esencia y como seres incapaces también de crear nuestra realidad, copiamos aquella y con ese pensar absurdo nos hacemos espacio entre todos y todo, pero nadie tiene la razón, la única forma de encontrar esa razón a estas alturas es crear nuevamente una humanidad, que nuevamente configurar su realidad en base a otros anteriores.

Lo único que nos queda entonces es cuestionarnos a nosotros mismos, ¿somos originales?, o estamos marcados como todos con un código de barras; si tienes la valentía de creer que eres original, permíteme decirte que estas marcado, primero tienes nombre y eso te configura en gran medida, en esta sociedad llena de absurdas claves y costumbres no es lo mismo ser Juan, que ser Eulalio, por ejemplo, y puede parecer absurdo pero tus primeras experiencias con ese nombre te configuraran por el resto de tu vida, tu familia, tu status social, el clima, todo te configura hasta transfórmate en lo que genéticamente jamás habrías llegado a ser. ¿Y si solo dependiéramos de un factor genético? Nada seria más triste, no podríamos elegir nuestro destino o por lo menos simular que lo hacemos, es un poco mas extremo a lo que vivimos hoy.

En esta búsqueda de algún razonamiento mas palpable y real, me he dado cuenta que sigo siendo la copia fiel de la humanidad, ni siendo Dios podría deshacerme de esa carencia, pues Dios es nuestra propia creación, por tanto tiene nuestras mismas limitaciones y quizás más. Por que nuestro propio pensar es erróneo desde un principio; la verdad es que no somos hechos a imagen y semejanza de dios, si no nuestro orgullo nos hizo crear a dios a nuestra imagen y semejanza.

Pero no me desviare del tema...

En conclusión solo me queda decir que en base a todo lo dicho y volviendo a mis primeras palabras sobre las creaciones del hombre y mas precisamente a lo que llamamos arte, este es solo fruto de una copia repetida infinitamente que termina plasmándose y quitándole lo ultimo de lo que quedaba de ella misma para se vista como una figura circense, como un mero artilugio decorativo sin ninguna profundidad mas allá de eso, un elemento decorativo, nada mas. Así es como llegamos a desfigurar el sentimiento, a simplificarlo, definiendo algo tan puro y grande en tan solo un icono, un símbolo, que ni siquiera tienes raíces, definiendo por ejemplo el amor con un corazón… no haré mas referencias con respecto a eso, pero quedo claro mi pensamiento.

Y la poesía... uno no puede ordenar las palabras de manera tan estética y planeada, y mas encima rimar, ¿Qué clase de sentir es ese?; creo que la poesía hasta me molesta, la hipocresía, es degradante de los mismos sentimientos, los deja en una posición totalmente virgen y ajena a la pasión real de los mismos, es disfrazar de burgués al sexo, cuando este en su mágica materia, no puede disfrazarse, solo mostrarse, y no se puede siquiera ser expresado, solo sentirse. Y me sorprende que lo diga con tanta convicción, cuando nunca me ha enamorado y solo he besado en mi vida, pero es que con tan poca experiencia y tan poco sentir que he acumulado; igual me identifico con esas palabras y con ese sentir; entonces es cuando me pregunto, si yo me emociono con un beso que sé que no es de amor puro y total, solo es de gustar, y si yo me enamoro de la palabra amor sin haber sentido amor nunca, entonces, ¿Qué se debe sentir el amor real y vivenciado en toda su pulpa?, entonces es cuando me encuentro con poemas, rimas y frases que “pegan”, y simplemente no entiendo nada y me da vergüenza ajena esos “poetas”. Simplemente leo y siento que se burlan del sentimiento, planeándolo y dándole ritmo.

Y aunque se que no cambiare mentes y alo mejor ni siquiera se lea, en ultima instancia estaré desahogando de alguna manera mis ganas de que se reconozca de verdad que el arte es arte, y como yo lo entiendo, el arte es la expresión y el reflejo de algo que llevamos dentro; rabia, pasión, amor, pena, etc.

El arte se merece que seamos auténticos, reales, a veces fantasiosos, siempre y cuando reconozcamos que es fantasía, se merece respeto por ser la que nos lleva a sacar eso que de otra manera no saldría de nuestro interior; pero ¿que hacen las personas defectuosas?, lo que hacen es vender, ganar, prostituyen el sentimiento, lo falsean, lo manosean hasta ser repetitivo, negocian con la metafísica, se ríen de los impulsos, como el hijo bastardo de los sentimientos; como si se avergonzaran de ellos, y por eso los disfrazan y por eso somos infelices, por que recibimos todo eso y creemos en la felicidad poetizada cuando la felicidad temporalmente es igual que un impulso.